Este mirador ofrece una panorámica amplia de buena parte del Valle de Polaciones y la visión próxima de uno de los valles del término, el del río de la Guariza. Desde el punto de observación, en la solana de Peña Sagra, al pie del pico de la Cueva, el panorama se cierra en el horizonte, de sureste a norte, con la línea de cumbres del alto cueto de la Concilla (1.992 m) y la Peña Jelgueras, modelados sobre conglomerados y areniscas triásicos. El rebaje del collado de Sejos da paso al farallón de la sierra del Cordel, por encima ya de los 2.000 m en su línea de cumbres, con el hito del pico Tres Mares, y la sierra de Peña Labra, con su característico escarpe occidental.

Los primeros planos y el plano medio permiten contemplar y leer el paisaje de buena parte del valle de la Guariza, construido y modelado dentro de los territorios históricos de las aldeas de San Mamés y Belmonte. La ladera meridional del valle, hasta las cumbres alomadas del Llan de la Piedra y los cerros redondeados que por el este llevan hasta el portillo de las Brañas y la collada del Vedujal, pertenecen a Belmonte y ofrecen un paisaje forestal con denso hayedo de propiedad concejil, justo a espaldas de la aldea; ésta, compuesta por dos núcleos, con iglesia y espadaña, cuenta con una mies de formas irregulares adaptada a los rellanos del relieve, que conserva aún parcelas de cultivo, aunque dominan los prados. Ladera abajo, hasta el río, la fuerte pendiente justifica la cubierta forestal mixta de hayas y robles hasta el soto-aliseda de la Guariza.

Al pie mismo del mirador, sobre un rellano de cierta anchura y orientación sur, se emplazan  la aldea de San Mamés, con valioso caserío escalonado en torno a la iglesia de San Mamés y San Cayetano, y una mies relativamente extensa, adaptada a la pendiente y organizada en distintos pagos: La Ribera, Las Viñas y El Vallejo, contiguos al pueblo, y El Llano, La Garma y Las Redondas, valle abajo hasta las inmediaciones del río  y el núcleo de Pejanda.

Por detrás del punto de observación, la empinada ladera, tapizada de un matorral abierto y con presencia de pedreras, asciende hasta el Cueto Cucón; al suroeste se perciben las agrupaciones de invernales de San Mamés (La Gándara, Las Selviellas, El Tombal, El Toral, Las Gajatas), algunos de ellos con sus edificios abandonados y semidestruidos, colonizando la parte baja de la vertiente meridional de Peña Sagra, salpicados o separados por bosquetes de abedul y acebo en torno a los arroyos, y dispuestos entre el camino del Tombal al collado de las Invernaillas –desde el que se tiene una excelente visión de detalle- y el arroyo de Pejanda o de la Guariza. Por encima de los invernales y en la misma dirección cierran la escena las altas brañas del cotero del Tejo y el collado de Las Invernillas.