Puente de la Hermida
Puente de la Hermida
Este puente se construyó en la primera década del siglo XX para permitir a la carretera CA-282 conectar su trazado desde Puentenanda y Lamasón con la del desfiladero de La Hermida
La estructura es de fábrica de sillería y sillarejo, de rasante recta, formado por dos bóvedas escarzanas apoyadas sobre estribos y pila central del mismo material, que fue extraído de canteras próximas.
La sección transversal está formada por material de relleno, un hormigón de limpieza y aglomerado para la rodadura, estos últimos añadidos posteriormente. La sección la delimitan dos muretes a modo de pretil formados originalmente por hiladas de sillería intercaladas en sentido longitudinal con piezas monolíticas, algunas aún conservadas. En planta, a la altura de los estribos se dispone de apartaderos para permitir el cruce de vehículos y peatones.
Hasta su construcción la conexión entre ambos caminos se hacía por un puente de madera formado por dos vigas rectas apoyadas en una pila de fábrica cimentada sobre una roca que afloraba en el centro del río, y dos estribos también de piedra.
Según criterio del ingeniero todos los apoyos se hallaban en estado ruinoso y no eran suficientes para soportar el empuje de las bóvedas de fábrica que se proyectaban, pero el emplazamiento era el idóneo, por lo que decidió desmontar el puente de madera y aprovechar la madera para situar aguas abajo un puente provisional mientras se construía el definitivo. Quedó abierto al tránsito en el año 1915.