Casilla de peones camineros de Los Troncos
Las casillas de peones camineros tenían la misión de atender a la conservación de la carretera, proporcionar espacio para vivienda al personal encargado de realizarla y auxiliar a los viajeros
Establecía la legislación de carreteras de mitad del siglo XIX que las casillas se proyectasen a la vez que el camino y que en su interior se habilitasen espacios para guardar los aperos necesarios para la conservación (picos, palas, rodillos compactadores…) y otros para residencia de los peones camineros y sus familias.
Esta, llamada de “Los Troncos”, es una de las seis incluidas en el proyecto de la carretera del Collado de Piedras Luengas a Tinamayor y se localiza en el límite entre los términos de Puentenansa y Tudanca.
Es una construcción de planta rectangular (100m2) y una altura, con cubierta a dos aguas. La estructura original es de piedra y madera, el hormigón del soporte de la cubierta es de una reparación posterior. Dispone también de un patio trasero (corral) con muros perimetrales de piedra de mampostería. En él se encuentran restos, adosados a la pared, de ladrillos que pudieron pertenecer a algún tipo de horno.
Distribuida en una única planta en la que todo el espacio interior de la edificación se encuentra destinado al almacenamiento de material diverso. Parte del antiguo espacio interior de la vivienda se ha reconvertido en un refugio, que se encuentra abierto directamente al exterior.
Después de la restauración parcial que sufrió la casilla se construyó en la parte delantera del edificio un refugio que dispone de una chimenea. Para tal efecto se debió de derruir parte de la fachada principal, permitiendo así el acceso al refugio sin necesidad de entrar a la casa.